Sabemos sobradamente que muchas obesidades están producidas por medicamentos y, para que usted obtenga una mejor orientación, he aquí los más habituales.
Se nombra el principio activo químico, no el nombre o marca comercial.
- Estimulan el apetito:
Alcohol, insulina, esteroides (se utilizan para aumentar la masa muscular), hormonar tiroideas, psicótropos (antidepresivos), medicamentos para la ansiedad, nerviosismo, antihistamínicos, etc.
- Disminuyen el apetito (las ganas de comer):
Anfetaminas, digital, pemolina, ciclofosfamida, indometacina, morfina, glucagón, agar-agar, fibras, goma guar, fucus, espirulina, kelp, algas, etc.
- Provocan mala absorción de los alimentos y nutrientes:
Antibióticos, antivirales, fenindiona, salvado, ácido p-amino salicílico, Sen, indometacina, frángula, parafina líquida, etc.
- Producen hiperglucemia:
Cumarinas, antivirales, fenotiacidas, medicamentos para el cáncer, analgésicos, fenotiazinas, azucares, diuréticos, etc.
- Provocan hipoglucemia:
Barbitúricos, sulfamidas, fenacetina, ácido acetilsalicílico, IMAO, beta bloqueadores, travalera, Copalchi, fenilbutazona, acarbosa, etc.
- Aumentan la concentración de grasas en sangre:
Hormona del crecimiento, anticonceptivos orales, tiouracilos, antivirales, corticoides, clorpromazina, etc.
Como ya se podrán imaginar la lista de medicamentos es larga e interminable, estos medicamentos nos provocan cambios en el metabolismo y por edén obesidad y mala salud.